Queridos Hermanos en el Señor:Este tiempo de Cuaresma en el que mi tiempo como Hermano Mayor está llegando a su recta final, quería pedir a todos mis hermanos soleanos que intenten vivir este tiempo aprovechando cada momento que Jesucristo nos ofrece.
Han sido muchos los momentos buenos vividos, pero también hemos atravesado situaciones no tan “buenas” que hemos sabido sobrellevar unidos como lo que somos, “hermanos”.
Ha sido un caminar difícil del que sólo, con la presencia de la Virgen de los Dolores y del Cristo de los Afligidos, he intentado aprender y avanzar hacia adelante.
Momentos de alegría, de sufrimiento, de emociones… en los que si no hubiera sido por Ellos, quizás no hubiese sido tan llevadero mi mandato.
Hermanos soleanos, desde estas líneas, y desde la humildad de mis palabras, os invito a que sigamos aprendiendo de Jesús haciéndolo presente en nuestras acciones hacia nuestros hermanos y en nuestra vida diaria. Que Él sea el centro de todas nuestras vidas.
Agradecer cómo no, a mi Junta de Gobierno anterior y a la actual todos estos momentos, siempre trabajando día a día y sin descanso, procurando siempre lo mejor para esta señera y querida Hermandad.
Y como no podía ser de otra forma, desearle al futuro Hermano Mayor y a su Junta de Gobierno, que tras el inminente Cabildo de Elecciones tomarán posesión y jurarán sus cargos ante nuestros Sagrados Titulares, que sigan siempre con paso firme hacia el camino que Dios nos brinda. Que tengan siempre presente la figura de Dios en todas sus decisiones.
Que el Santísimo Cristo de los Afligidos y su Bendita Madre de los Dolores les allanen el camino de sus vidas y la pongan al servicio de esta Hermandad. Y que todos, a través de Ellos, aprendamos a ser Verdaderos Cristianos.